Comisión elaborará nuevas exigencias para mitigar ruido externo.
por Oriana Fernández en La Tercera
Cuatro de cada 10 denuncias que se interponen ante la Superintendencia de Medio Ambiente corresponden a personas que se ven afectadas por ruidos molestos. Debido al problema que generan en los barrios los altos decibeles, el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) comenzó ayer a actualizar el reglamento de acústica de la Ley de Urbanismo y Construcción -que regula esta materia-, con el fin de exigir un mejor estándar de aislación en los proyectos habitacionales, tomando en cuenta fuentes nuevas como el tráfico y las industrias, que pueden afectar a las familias dentro de los inmuebles.
Según Ragnar Branth, jefe de la Dirección Técnica de la cartera, la norma actual está hecha para la aislación de estructuras divisorias entre las viviendas, como son pisos y muros, con el fin de no escuchar los sonidos emitidos en las propiedades vecinas.
“No considera la habitabilidad y la salud de los habitantes del inmueble”, dice, por lo que ahora, con la actualización de la norma, se podrán resguardar.
Branth asegura que se harán exigencias para nuevos elementos de casas y departamentos, como son techumbres y muros exteriores, los que influyen en la intensidad del sonido que llega desde el exterior, y que pueden llegar a ser nocivos para la salud de los habitantes de ese hogar.
Además, se podría mejorar la aislación de elementos, como instalaciones sanitarias (ductos), los que pueden ser revestidos.
Norma vigente
El reglamento vigente establece que los inmuebles deben ser capaces de disminuir o atenuar en 45 decibeles el ruido provocado en el inmueble vecino.
La elaboración de esta actualización del reglamento estará a cargo de una comisión integrada por el Minvu, expertos de universidades y la Cámara Chilena de la Construcción, entre otros.
Vivienda espera que los cambios se acerquen a la realidad internacional. En Europa, por ejemplo, las viviendas deben tener un índice de capacidad acústica de 60 decibeles.
Para el director del Instituto de Acústica de la Universidad Austral, Enrique Suárez, en esta discusión es clave que se puedan incorporar niveles de aislación de acuerdo con la zona donde se edifique un proyecto habitacional. Según el último mapa de ruido elaborado por esa entidad, el 54% de la superficie de Santiago Centro está por sobre la recomendación de 65 decibeles durante el día.